Sulfato de lauril éter de sodio (SLES) como un superhéroe en el mundo de la limpieza, con sus increíbles poderes de formación de espuma y eliminación de suciedad. Se trata de industrias para eliminar la suciedad, el aceite y la grasa. Además, combina bien con productos de cuidado personal y les aporta una textura suave que nos encanta. La mejor parte es que es suave para la piel, lo que permite que incluso las personas con piel sensible lo utilicen sin preocupaciones. En entornos industriales, SLES desengrasa eficazmente piezas de maquinaria sin causar ningún daño.
Sulfato de lauril éter de sodio (SLES) como un superhéroe en el mundo de la limpieza, con sus increíbles poderes de formación de espuma y eliminación de suciedad. Se trata de industrias para eliminar la suciedad, el aceite y la grasa. Además, combina bien con productos de cuidado personal y les aporta una textura suave que nos encanta. La mejor parte es que es suave para la piel, lo que permite que incluso las personas con piel sensible lo utilicen sin preocupaciones. En entornos industriales, SLES desengrasa eficazmente piezas de maquinaria sin causar ningún daño.